La salud mental nunca ha sido tan fácil de discutir y, ¡con razón! La vida de hoy puede estar llena de presiones, estrés y obstáculos emocionales, que pueden agotar a cualquiera. ¿Un remedio inesperado pero efectivo que ha demostrado su eficacia?La terapia asistida por mascotas. ¡Cualquiera que haya sentido consuelo solo por estar cerca de un animal sabe de primera mano su efecto terapéutico!
Descubre por qué pasar tiempo con animales puede ser reconfortante y sanador.
1. La Comodidad del Amor Incondicional
Uno de los mayores obstáculos que enfrentan las personas al lidiar con la ansiedad, la depresión o la soledad es sentirse incomprendidas por los demás. Las mascotas entienden sin necesidad de que te expliques. No juzgarán, no interrumpirán ni ofrecerán consejos no solicitados. Las mascotas están a tu lado, completamente presentes en cada momento del camino.
La terapia asistida por mascotas para la salud mental utiliza esta presencia sin juicios como un salvavidas. Perros, gatos e incluso mascotas más pequeñas como conejos o aves proporcionan apoyo emocional.
2. Construyendo un Sentido de Rutina y Propósito
Para las personas que viven con enfermedades mentales como la depresión, incluso las tareas básicas pueden volverse difíciles de realizar. Pero las mascotas dependen de nosotros diariamente para alimentarse, pasear, limpiar y jugar.
Los humanos que dependen de los animales a menudo descubren que la responsabilidad diaria hacia una mascota les brinda una gran fuente de propósito y motivación. Actos simples como llenar su recipiente de comida o sacar a pasear a su mascota pueden aportar la estructura esencial en un estado mental caótico.
La terapia asistida por animales para la salud mental se ha utilizado durante mucho tiempo como parte de programas de recuperación y centros de tratamiento a largo plazo.
3. El Toque Físico Que Calma la Mente y el Cuerpo
¿Hay algo más maravilloso que acariciar a tu perro o a un gato? Hay algo más que resulta reconfortante. Es un hecho que es muy probable que el cortisol, la hormona del estrés, disminuya drásticamente, y al mismo tiempo, se produzcan fácilmente hormonas de la felicidad como la serotonina y la oxitocina.
Esa es la razón por la que en la mayoría de los hospitales y centros de salud mental, se utilizan perros como terapia para alegrar a los pacientes. Incluso unos minutos de un encuentro amistoso con un animal tranquilo y amable pueden tener un efecto calmante en la presión arterial, reducir los niveles de ansiedad e incluso minimizar los síntomas de ataques de pánico. Para las personas diagnosticadas con TEPT o alguna otra condición relacionada con traumas, tal compañero les proporciona un firme sentido de seguridad.
4. Combatiendo la Soledad y el Aislamiento
Sentirse solo no solo significa estar físicamente solo, sino que es un estado emocional de desconexión, incluso en medio de muchas personas. Esto convierte la soledad en una de las partes más difíciles de la enfermedad mental para un gran número de individuos. Sin embargo, los animales demuestran ser amigos fiables que pueden aliviar el sufrimiento.
Las personas mayores, especialmente aquellas que han perdido a alguien cercano y viven solas, obtienen mascotas principalmente como una fuente de felicidad y compañía. Los jóvenes que todavía tienen dificultades para socializar debido a la ansiedad pueden ayudar a su situación al tener una mascota. Muchos dueños de mascotas dirían que sus animales son la razón por la que se sienten menos solos.
Por eso, el beneficio de las mascotas para la salud mental de una persona no se trata solo de lo evidente. Se convierten en el principal apoyo emocional de la persona cuando el mundo real se vuelve abrumador.
5. Mejorando la Regulación Emocional y el Enfoque
Los animales y los humanos tienen sensaciones similares que pueden restablecer la normalidad tras un flujo extremo de emociones. Las personas con TDAH, autismo y otras condiciones neurodiversas a menudo encuentran paz a través de las conexiones con una mascota. Las mascotas tienen un efecto calmante en el cerebro al proporcionar información sensorial continua. La respiración constante de los perros, el suave ronroneo de los gatos e incluso la alimentación rítmica de los peces pueden ayudar al cerebro a relajarse y mejorar la concentración.
Los niños sienten una conexión especial con los animales de terapia mientras aprenden sobre el cuidado de las mascotas, la ternura y la responsabilidad. Con el tiempo, estas actitudes pueden ayudar al niño a ganar confianza y desarrollar una mejor actitud hacia sí mismo.
De hecho, los programas de terapia asistida por mascotas han cobrado protagonismo en escuelas y entornos de educación especial debido a los beneficios demostrables que proporcionan.
6. Fomentando la Interacción Social Sin Presión
Hablar con otras personas puede ser una tarea difícil por sí misma. Por ello, las mascotas son la mejor solución al proporcionar compañía sin ser abrumadoras. Es muy probable que, mientras paseas a tu perro, conozcas al menos a una persona que te sonría, te haga preguntas sobre tu animal o incluso inicie una conversación.
Para una persona con ansiedad social, charlar es una manera de acostumbrarse a estar cerca de otras personas sin comunicarse directamente. La razón es bastante simple: no eres el centro de atención, tu mascota lo es. De esta manera, la charla se convierte en una actividad altamente accesible.
La presencia de mascotas a menudo resulta en que los pacientes se abran más durante las sesiones de terapia. La presencia de animales puede cambiar por completo la sala de terapia, haciéndola sentir menos como un hospital y más como un hogar.
La Sanación No Siempre Viene en una Pastilla
No todos los tipos de terapia son adecuados para cada individuo. Sin embargo, una de las maneras más frecuentes en las que las personas encuentran fortaleza diariamente es a través del amor por los animales. El amor por los animales no es una solución mágica al problema, aunque puede ser un importante comienzo. Ya sea que sientas ansiedad o estrés, que enfrentes heridas del pasado o simplemente que estés teniendo un mal día, un animal peludo o con plumas podría ser lo que tu corazón necesita.
Utilizar mascotas para el tratamiento de la salud mental no es lo mismo que abandonar la medicación o el cuidado profesional. Es la adición de otra capa de apoyo. Solo un perro moviendo su cola, un gato ronroneando suavemente o incluso el canto de un periquito pueden traer un poco de alegría en los momentos más oscuros.
A veces, la sanación no se asemeja a visitar la consulta de un terapeuta. A veces, parece una nariz fría en tu mano, una cola moviéndose junto a la puerta o un cuerpo cálido y somnoliento acurrucado a tu lado al final de un largo día.