Cómo sobrevivir a un viaje por carretera con tus hijos

Mamás Modernas
Por Mamás Modernas
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Como familia, somos afortunados de poder tomar unas cuantas vacaciones durante el año; todas están a una distancia manejable desde nuestro hogar (entre dos y cinco horas).

Como madre, he sobrevivido a muchos viajes por carretera en los últimos nueve años: exactamente 72 viajes y aproximadamente 500 horas atrapada en mi coche con mis hijos. Nota: esa cifra no incluye los viajes de una hora a la playa al este de mi casa, ni los momentos en que nos quedamos atrapados en el tráfico yendo al zoológico, o, bueno, yendo alrededor de la maldita manzana.

Hemos tenido muchos viajes por carretera que fueron miserables, desde la vez que tuve que amamantar mientras conducía (sí, leíste bien, mientras el coche estaba en movimiento) camino a casa desde Maryland, hasta mi hijo vomitando a chorros en el coche, pasando por quedarnos atrapados en horas y horas de tráfico. Como resultado, he desarrollado algunos consejos, trucos y estrategias para sobrevivir… porque, bueno, conducir y beber es ilegal.

Realmente disfruto los viajes por carretera. Me encanta empacar el coche, ponerme cómodo para leer mi novela o las cientos de revistas que tengo esparcidas por la casa, navegar por la carretera abierta, buscar puntos de referencia familiares, hacer esa parada en nuestro “parador habitual”, y ponerme al día sin parar en todas mis redes sociales.

Pero lo que no me gusta es ser interrumpida un millón y dos veces porque mi hijo de cinco años quiere saber por qué el cielo es azul (literalmente) o porque el de nueve años pensó que vio un “cuervo moteado de pelo rojo que NO es indígena de esta área”, cuando en realidad probablemente era un maldito paloma. Aunque mis chicos tienen experiencia en viajes por carretera, también son niños curiosos que NUNCA DEJAN DE HABLAR.

No me malinterpretes, no es que no quiera conversar con mis hijos… ¡lo hago! ME ENCANTA el sonido de sus voces, pero después de tres horas de conversación ininterrumpida, separando peleas, jugando a “Veo veo”, el juego de rimas y todas las otras cosas que se me ocurren para mantener a mis hijos entretenidos, necesito un poco de tiempo en silencio. Honestamente, tener tiempo en el que no escucho sus adorables voces realmente me ayuda a apreciar sus encantadoras voces.

Así que aquí están mis cinco mejores consejos para sobrevivir un viaje por carretera con niños:

1. Snacks

Tener suficientes snacks a mano en la “pequeña nevera” para que puedan darse un atracón, pero no tantos como para tener que hacer múltiples paradas en el baño o que vomiten, eso arruinará todo.

2. Dispositivos

Tener todos los dispositivos que poseas listos y asegurarte de que estén cargados. No me importa si tienes que llevar tu televisor de 13 pulgadas de 1980 en el coche conectado a algún enchufe atado a tu motor, consigue un dispositivo electrónico en ese coche para entretener a los malditos niños. El iPad, iTouch, iPhone, cualquier cosa que el ‘Gran Hombre’ (Steve Jobs) desarrolló mantendrá a tus hijos alejados de quejarse, tal vez, durante todo el viaje. #ganador.

3. Libros

Ok, esto es un poco complicado ya que no todos pueden leer en un coche y muchas personas se marean si leen en un vehículo en movimiento. Es una apuesta, pero si crees que tus hijos pueden soportarlo, asegúrate de tener al menos dos libros que sea obligatorio que lean en el coche. Lo más probable es que se concentren (especialmente los mayores) y estarán leyendo al menos unos buenos 20 minutos antes de que el aburrimiento comience.

4. Música

La música hace girar el mundo. Mis hijos aman la música, así que si puedes encontrar una buena emisora para disfrutar, adelante, o si eres tan afortunado como nosotros, conecta a los pequeños con algunos iPods (el ‘Gran Hombre’ debió pensar en los padres cuando creó esta maravilla) y unos auriculares, y es como si hubieras ganado la lotería.

5. El Juego del Silencio

Este es el juego que saco cuando las cosas se ponen difíciles o si todo lo demás falla. Esta es la estrategia más efectiva que un padre puede usar para evitar que un niño hable incesantemente durante un viaje por carretera. Pero no se puede tomar este juego a la ligera; DEBES establecer las reglas antes de comenzar:

A. No hablar.

B. Si alguien habla, pierde.

C. Si quieres hacer una pregunta, no puedes; no se puede hablar.

D. No puedes usar ningún dispositivo, solo puedes leer.

E. No pelear, imitar, hacer nada que moleste a tu hermano o ambos quedarán fuera.

F. Solo puedes hablar si necesitas vomitar o ir al baño.

G. Quien gane obtiene $5.00 para el salón de juegos; la corrupción funciona cada vez.

H. Si te quedas dormido, automáticamente obtienes los $5.00 para el salón de juegos; esto casi garantiza que se queden dormidos. Puede ser un acierto o un error: si viajas durante el día puede que no quieras que duerman, pero a mí no me importa; adelante, duerme cinco horas y desvela toda la noche porque… ¡estamos de VACACIONES!

Si no estableces estas reglas antes de jugar, estarás gritando “¡ESTAMOS JUGANDO AL JUEGO DEL SILENCIO O VOLVEREMOS!” Para nosotros, este juego duró todo el viaje por carretera. (Ok, estoy mintiendo, no duró todo el viaje, pero sí obtuvimos dos malditas horas de SILENCIO – ¡dorado!)

Agradeceré tus gracias por adelantado o abrazos cuando regreses de vacaciones.

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