Aquí en ModernMom, tenemos una filosofía: la mejor manera de comenzar el fin de semana es con un adorable video de animales.
Y así, como hoy es viernes, me encontré navegando por Internet esta mañana en busca de un pedacito de ternura. Ya saben, algo como “Mango ama el batido” o ese video de los ositos panda bebiendo en el tobogán.
Pero entonces las cosas dieron un giro oscuro.
¿Por qué? Porque seguía encontrando videos de gatos siendo descaradamente crueles. Tirando cosas de las cómodas, haciéndole tropezar a niños pequeños, empujando a sus amigos de las escaleras….
Los gatos. Los matones del patio de recreo del mundo animal.
Ahora, esto puede no ser una novedad para todos. Si alguna vez has tenido un compañero felino, sabes de su capacidad casi ilimitada para el desdén y la condescendencia.
Intenta ponerte un par de botines de ante o aparecer con una bolsa de Croquetas marca genérica. Con solo una mirada, tu gato juzgará tu gusto en moda y te avergonzará por no gastar unos dólares extra en los lujosos Fancy Feast.
“¿Robaste esos zapatos a un elfo?” puedes prácticamente oírlo refunfuñar.
Así que sí. Los gatos son unos egoístas. ¿No me crees? Mira las pruebas a continuación:
No les importan tus vitaminas.
Hacen tropezar a los bebés….
…y empujan a sus amigos por las escaleras.
Megan Sayers es la editora principal de ModernMom. Síguela en Twitter @MeganSayers
